La fertirrigación es un sistema integrado de irrigación y fertilización, donde los nutrientes esenciales se disuelven en el agua de riego y se aplican simultáneamente a las plantas. Este método permite una distribución uniforme de los fertilizantes, favoreciendo un suministro constante de nutrientes a lo largo del tiempo, lo que optimiza el crecimiento y la salud de las plantas.

El proceso de fertirrigación es sencillo y eficiente. Para implementarlo en su jardín, se necesita un sistema de riego (como el riego por goteo o aspersión) que esté equipado con un inyector de fertilizantes. Este inyector mezcla los fertilizantes solubles en el agua antes de ser distribuida a las plantas. Los nutrientes, una vez disueltos en el agua, llegan directamente a las raíces de las plantas, lo que facilita su absorción y maximiza su efectividad.

Beneficios de la Fertirrigación en el Jardín de una Vivienda

1. Ahorro de agua 💦: Al aplicar agua y fertilizante de manera más eficiente, se reduce el desperdicio, haciendo que tu jardín sea más sostenible.
2. Nutrición precisa 🌾: Los nutrientes llegan directamente a las raíces, asegurando que las plantas reciban lo que realmente necesitan, mejorando su salud y crecimiento.
3. Menos trabajo 🙌: Con el sistema automatizado, no tendrás que preocuparte por aplicar fertilizantes manualmente, lo que te ahorra tiempo y esfuerzo.
4. Mejor rendimiento 🌿: Al suministrar nutrientes de manera constante, las plantas crecen de manera más saludable, con un desarrollo más rápido y flores/frutos de mejor calidad.
5. Menos riesgo de enfermedades 🦠: Al evitar la acumulación de fertilizantes en la superficie del suelo, se reduce la posibilidad de atraer plagas y enfermedades.

La fertirrigación es una opción ideal para optimizar el cuidado de tu jardín, garantizando que tus plantas reciban lo mejor mientras ahorras recursos y tiempo.

¿Qué sistema escoger?

Para poder implantar el mejor sistema posible es necesario conocer la presión y el caudal de agua con el que vamos a trabajar en el jardín en cuestión. Una vez adquiridos todos los conocimiento y requisitos, pasamos a la elección del Dosatrón (equipo de fertirrigación) que más se adecúa a nuestras necesidades.

Este Dosatrón se basa en una bomba con motor hidráulico que se acciona exclusivamente mediante la presión y el caudal de agua, formado principalmente por: Pistón motor: que se desplaza hacia arriba y hacia abajo gracias a la presión del agua y es la base de su motor hidráulico.

Pistón dosificador: este pistón accionado por el motor inyecta de modo continuo un volumen fijo de producto. Esta cantidad de producto va en proporción al volumen de agua que pasa a través del motor. Por lo tanto, vamos a tener una dosificación constante que variará en función del agua y de la presión que reciba y que será directamente proporcional. Sistema de válvulas: que permiten la inversión del movimiento y su óptimo trabajo de inyección.

Ventajas de usar la fertirrigación

• Funciona sin electricidad: este aparato trabaja con la presión del agua y no precisa de conexión eléctrica, por lo que no supondrá un gasto adicional en la factura de la luz.

• Asegura una dosificación precisa, homogénea y continua: como hemos indicado antes, gracias a su pistón dosificador habrá un aporte de nutrientes proporcional al agua que reciba.

• Adaptado a todos los productos: lo que significa que la selección de productos a emplear en el jardín no dañará el sistema, ya que está diseñado para albergar productos biológicos, aceites, humectantes, etc.

• Ahorro: nos permite ahorrar en mano de obra, en productos y en agua gracias a su dosificación regulada y a su inyección continua gracias al pistón.

• Sistema automático: se puede colocar un programador automático para no tener que estar pendientes del sistema y que le llegue el agua a la fertirrigación, en los momentos que se consideren necesarios.